Los «riders» de Deliveroo en huelga

Los repartidores a domicilio de Deliveroo ya no pueden más. El pasado viernes se manifestaron frente las puertas de las sedes de dicha empresa en Barcelona y Madrid para reclamar mejoras en sus condiciones laborales, las cuales describen como esclavitud.

A raíz de estas manifestaciones, varios trabajadores de Barcelona, Madrid y Valencia han sido despedidos. Uno de estos despidos ha sido el de Eva LLagostera, una de las portavoces sindicales de Ridersxerechos (forma parte de IAC-Intersindical Alternativa de Catalunya). En su caso, la empresa justificó su despido acusándola de haber trabajado bajo los efectos del alcohol, «sin aportar ningún tipo de prueba», tal y como explica Eva. Para ella, el verdadero motivo de estos despidos es coaccionar a los trabajadores para que desistan de organizar la huelga el domingo 2 de julio.

El grito de «si no cobramos, no rodamos» los repartidores de Deliveroo se han manifestado delante de dos sedes de la empresa 

Sin embargo, la huelga sigue convocada y los repartidores, todos ellos autónomos, van a seguir adelante. Estos trabajadores demandan un total de 7 peticiones con las que pretenden hacer del trabajo de repartidores un trabajo digno. Al tratarse de empleados autónomos los gasto de bici, moto y demás corren a su cargo y por ello piden una jornada laboral de 20 horas semanales (jornada que se les prometió aunque de manera verbal cuando firmaron los contratos). Entre las peticiones destaca la que exige que los acuerdos queden todos por escrito para que el pago de sus horas (el pago por hora equivale a dos pedidos entregados) no pueda ser alterado. Una de sus quejas más llamativas es la exigencia por parte de la empresa de estar disponibles durante los turnos aunque en muchos turnos no haya pedidos, es decir, sería trabajar gratis. Para comprender esta situación solo hay que compararla con una tienda: si un empleado pasa las horas de su turno en la tienda pero no vende nada, no cobra.

Según explican algunos trabajadores el sueldo por hora va disminuyendo hasta que se llegan a cobrar 3€ la hora, lo que supone, para una jornada de 20 horas semanales, 240€ al mes.

Los trabajadores han intentado ser escuchados pero la empresa ha cerrado cualquier vía de comunicaciones y esta semana ha despedido a los trabajadores que han concedido entrevistas incluido algún portavoz sindical. Por eso, el resto de sus compañeros pedirá que se readmita de manera inmediata a estos trabajadores, al tratarse de despidos totalmente injustificados.

 

Fuentes: OK Diario, Público.

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