1. SUBIR ACOPLADO
Si eres un biker al que le gusta marcar la diferencia en las rampas más complicadas, un manillar corto y plano se torna la mejor opción, aunque la consolidación de las 29” en el Rally conllevó la inclusión en los montajes de serie de modelos largos, de 740 mm en algunos casos, con la intención de lograr un mejor control gracias a una mayor abertura de los brazos y la caja torácica.
De esta manera, también se puede lograr un mejor control en las pendientes de dos dígitos y ejercer más fuerza al escalar. Si primas la estabilidad sobre una posición más agresiva, esta última opción es la más adecuada.
2. EFECTIVIDAD ANTE EL CRONO
En la obtención de la mejor velocidad media entran en juego los manillares planos y cortos, de 680 a 720 mm de ancho. Favorecen la aerodinámica por encima de cualquier otra cualidad. También existe la posibilidad de eliminar algún separador de la dirección para bajar aún más el manillar, consiguiendo un plus de agresividad al ir mucho más acoplado. Estos manillares son los elegidos en la competición XC de alto nivel. Si cuentas con un presupuesto generoso, un modelo en fibra de carbono se torna como la opción ideal.
3. BAJAR RÁPIDOS Y SEGUROS
Si la intención es la de exprimir todas las posibilidades en los descensos, el manillar debe ensancharse, inevitablemente. El control de la dirección se incrementa al ejercer mayor palanca en los giros, dominando más rápidamente cualquier latigazo. Existen opciones de manillares anchos para todo tipo de modalidades, entre 730 y 760 mm, esta última medida la más utilizada en bicicletas de Enduro. Además, decantarse por uno de doble altura conseguirá erguir nuestra postura, mejoras que se traducen en mayor estabilidad y comodidad.
4. TODO EN UNO
Si, por el contrario, tu hábitat está en los descensos, pero sin perder capacidades de subida, y prefieres rutas con perfiles variados, los manillares planos con un ancho de 710 a 730 mm pueden ser un gran complemento. En el primero de los consejos ya hemos adelantado sus virtudes con ruedas de gran diámetro. El compromiso entre manejabilidad y estabilidad es indudable y podremos escoger entre planos o de doble altura, dependiendo si deseamos un punto más de comodidad en pistas o bajadas.
5. RUTAS LARGAS
El canon ideal de manillar Maratón es el estrecho y elevado. Rodaremos durante horas por pistas forestales y senderos, debiendo mantener una postura cómoda y lo más acoplada posible. De esta manera, lo que necesitamos es un modelo polivalente. La doble altura del cuerpo del manillar dotará de rigidez y estabilidad en los tramos más técnicos. No es recomendable uno muy ancho para largas distancias. Espalda y brazos lo acabarán notando.
6. GANAR LIGEREZA
La fibra de carbono se está introduciendo cada vez más en la fabricación de los manillares, ya sea con modelos de cuerpo de aluminio y acabados en carbono o los totalmente fabricados con fibras, ya sean trenzadas o unidireccionales. La rebaja en la báscula con respecto a uno de aluminio de la serie 6000 oscilará entre los 100 y los 150 gramos de media, aunque por lo general son más del doble de caros. Una alternativa asequible de aluminio de gran rigidez y ligereza son los manillares de la serie 2014, con pesos similares a los de carbono unidireccional.
7. ¿MANILLAR CON ACOPLES?
Los acoples parecen haber pasado a mejor vida debido a la gran personalización de modelos disponible actualmente y a la tendencia a eliminar peso a toda costa. Pero la comodidad y relajación de la postura que ofrecen los tradicionales ‘cuernos’ difícilmente se ha igualado. Las grandes firmas de componentes (Ritchey, Pro, XLC, Onoff), siguen fabricándolos, tanto en aluminio como en carbono y ergonómicos.
Un acople ofrece una plataforma extra de apoyo, que modificará nuestra postura para evitar que los músculos se agarroten al mantener la misma posición. Son muy útiles en largas subidas, aunque su principal inconveniente es que alejan las manos de las manetas de freno, ralentizando la capacidad de reacción.

8. ATENCIÓN A LAS PUNTERAS
La forma y ángulos de los extremos del manillar también son claves a la hora de elegir uno u otro modelo y conseguir mejorar nuestra postura y prestaciones. Unas puntas más abiertas, siguiendo la línea del resto del manillar, facilitarán un manejo agresivo, más aerodinámico, ideal para circuitos explosivos y técnicos. También se cierran y elevan para obtener mayor comodidad, perdiendo la posición de ataque propia del Cross Country.
Fuente: Revista Bike World