En la ciudad de Madrid existen multitud de carriles reservados para taxis y autobuses que también pueden ser ocupados por motos, pero no por bicicletas.

Si la vía es llana o existe una pendiente hacia abajo no hay problema, porque es posible mantener una velocidad aceptable y mantenerse a la izquierda del carril, pero al subir pendientes pronunciadas es de sentido común invadir el carril bus y pegarse a su derecha para facilitar el adelantamiento y protegerse a uno mismo.

Esto no es sólo de sentido común sino que también lo recoge la Ordenanza de Movilidad para la Ciudad de Madrid. Sólo puedes hacerlo en pendientes que te obliguen a circular mucho más lento que el tráfico a motor, y nunca en paralelo con otros ciclistas, pero puedes hacerlo.
Artículo 39 bis.
«En la calzada, las bicicletas circularán ocupando la parte central del carril. En las vías con más de un carril circularán siempre por el carril de la derecha. De existir carriles reservados a otros vehículos, circularán en las mismas condiciones por el carril contiguo al reservado, salvo que la señalización permitiera circular por ellos. Si el carril reservado estuviera en zona de pendiente desfavorable donde las bicicletas puedan encontrarse entre los tráficos de autobuses y vehículos en una situación incómoda y peligrosa, los carriles tendrán una sección mínima de 4,5 metros y la circulación de bicicletas se realizará lo más próximo posible a la derecha. Estará prohibida en estos carriles la circulación de varios ciclistas en paralelo».
La próxima vez que alguien te lo recrimine tienes argumentos para explicárselo. Buen fin de semana.