Nadie podía imaginar que una empresa, Orbea, creada en Euskadi en el siglo XIX, en 1840 para fabricar armas, pistolas en concreto, iba a llegar al siglo XXI elaborando las bicicletas con las que el ciclista asturiano afincado en Euskadi, Samuel Sánchez se iba a proclamar campeón olímpico en Pekín-2008 en la prueba de carretera…
De fabricar armas a hacer bicicletas ganadoras de oros olímpicos
