El ciclista excampeón del mundo de carreras Graeme Obree está tratando esta semana de establecer un nuevo récord de velocidad mediante tracción humana en tierra con Beastie (Bestia), una bicicleta muy poco convencional. Sin embargo, fue construida, dice Obree, «enteramente por mí, entre mi cocina y el taller de un amigo».
Obree viajará boca abajo, con la barbilla a dos centímetros de la rueda delantera, con los ojos mirando a través de una pequeña mirilla. El ciclista de 47 años, natural de Escocia, dispondrá de un máximo de cuatro intentos para batir el actual récord de 133km/h en un evento que se celebra en Battle Mountain, Nevada, EE.UU. A pesar de lo que potencialmente significaría el logro, gran parte del mundo del ciclismo no parece muy emocionado debido a una visión tradicional según la cual la tracción humana debe tener prioridad sobre la innovación mecánica.
Con su cáscara suave de Kevlar, fibra de vidrio y forma de torpedo, Beastie pareciera haber sido creada por la NASA. Sin embargo, fue construida, dice Obree, «enteramente por mí, entre mi cocina y el taller de un amigo». Bajo el caparazón pulido, hay una mezcla de componentes que incluyen una olla de acero inoxidable, que actúa como soporte del hombro, y partes de viejas bicicletas y patines de ruedas. Los aspectos verdaderamente revolucionarios son invisibles: la posición del ser humano en su interior (boca abajo), y el hecho de que Obree no pedalea, sino que empuja y hala un par de palancas con los pies. En cuanto a la posición, mientras que las bicicletas reclinadas suelen llevar al jinete tendido sobre la espalda, con los pies por delante, Obree volvió a los «inicios»: para ello borró de su memoria las ideas actuales sobre diseño de bicicletas y se concentró, simplemente, en la física del movimiento.
«Habiendo estudiado la física detrás del asunto, creo que un ser humano en perfectas condiciones físicas, con aerodinámicas perfectas, el sistema de manejo perfecto, perfectas condiciones atmosféricas y de viento, puede llegar a los 160 kilómetros por hora«. «En esta ocasión no creo que vaya a ser yo. Pero si puedo acelerar por arriba de los 90kpm y luego correr a toda velocidad hacia el récord mundial, veremos que pasa«.